En Orlando, un enfrentamiento entre el propietario de un bien raíz y su inquilino desemboca en tragedia, con un muerto y otro herido. Según la policía, el inquilino, armado, disparó contra dos personas que llegaron a la propiedad, dejando una víctima fatal en el lugar. El incidente se desencadenó cuando la propietaria solicitó al inquilino que desocupara el lugar, y llamó a un familiar como intermediario, resultando en el fatal desenlace.