Testigos dijeron que la perrita, que había escapado de casa, siguió al repartidor y que este eventualmente se detuvo y se la llevó. El hombre, Reinier Revilla, fue contactado por detectives casi un mes después de la desaparición de la mascota y admitió habérsela llevado, y dijo que aún la tenía en su poder, según la Oficina del Sheriff del condado Hernando.