Una niña brasileña de 8 años entró a un programa de astrónomos aficionados de la NASA y ya descubrió 18 nuevos asteroides en el espacio: conoce a Nicole Oliveira.
Los enigmas de la naturaleza nunca terminan. Y es que cuando se trata de biodiversidad, la comunidad científica continúa haciendo revelaciones dignas de antología.
Hay un extraño calamar cuya piel recuerda a la forma de una fresa, pero ese no es su rasgo más distintivo: sus ojos fueron un misterio científico durante años.
Un extraño anillo reveló una inusual relación entre los vikingos y los árabes que, hasta la fecha, tiene intrigados a los científicos. Una mujer vikinga fue la clave.7
Un experto dio la mejor explicación de por qué seguir teniendo hijos no va a arruinar el planeta como gran parte del mundo piensa. Eso no es lo que está acabando con la Tierra, sino otra razón.
Astrónomos descubrieron un nuevo exoplaneta que podría tener nubes de agua y temperatura templada similar a la Tierra: el hallazgo es intrigante y emocionante para la comunidad científica.
Un proyecto científico planea preservar diferentes especies terrestres enviando millones de espermatozoides a la Luna: te contamos cómo lo harán posible.
Un meteorito con destello verde fue capturado cayendo en uno de los volcanes más peligrosos del mundo en Indonesia y el fenómeno dejó imágenes asombrosas.
Frecuentemente se cree que el Internet llega a los celulares, computadoras y aparatos electrónicos desde satélites, pero en realidad son los cables submarinos los que llevan más del 95% del tráfico de datos.
Debajo de la Tierra existen dos estructuras del tamaño de continentes que son un misterio científico: conoce los blobs, el misterio que dejó a los expertos rascándose la cabeza.
El demonio de Tasmania es una especie en peligro de extinción y, aunque quedan pocos en Australia, una organización logró que nacieran 7 nuevos ejemplares.
Gracias a un par de huracanes en 2016 y 2017, los tiburones demostraron por qué son los animales marinos más valientes y la especie dominante del océano.
La sonda Voyager 1 detectó un ruido en el espacio a más de 21,000 millones de kilómetros de la Tierra y es un descubrimiento importante para la comunidad científica.